Inicio Sala de prensa «NO ME IMAGINABA QUE IBA A CONSEGUIR UN BUEN NÚMERO DE ORDEN Y MENOS LA MEJOR PUNTUACIÓN DE ESPAÑA»
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María Muñoz Claro, nacida en Sevilla el 18 de junio de 2000, conseguía el pasado mes de febrero la mejor calificación de España en el examen EIR con una puntuación de 133,3428. La joven sevillana ha decidido optar por la especialidad de Ginecología y Obstetricia, la cual desarrollará en el Hospital Universitario ‘Virgen del Rocío’. Durante su etapa de formación, María estudió en el Colegio Salesianos Santísima Trinidad de la capital hispalense para posteriormente graduarse en Enfermería en la Universidad de Sevilla.
REDACCIÓN
P: 133,3428 puntos en el examen EIR no es una tarea sencilla. ¿Cómo fueron los meses previos a la preparación del examen?
R: Empecé a prepararlo en marzo. En mi academia, en la primera vuelta, los primeros meses marzo a septiembre, estaba planificado para preparar el material para, de cara a una segunda vuelta, ponerse a estudiar a tope. La primera vuelta fue más light. Además, yo trabajé en verano y a partir de septiembre ya era únicamente estudiar. Obviamente hay que quitarse de muchas cosas. Hay temporadas en las que cuesta más como el verano o la Navidad. Está todo el mundo en la playa o en la calle y tú estudiando. Fueron las etapas más duras. Pero si quieres algo te tienes que quitar de algunas cosas. Me comparaba mucho con otras personas. Pensaba que otras personas no habían trabajado en verano y habían podido estar estudiando. Y le daba vueltas al tiempo que, entre comillas, había perdido trabajando. Cuando se acercaba el examen veía la gran competencia que había. con gente muy preparada. No me imaginaba para nada que iba a conseguir un buen número de orden y menos la mejor puntuación de España. Cuando veía lo de otros años decía madre mía esta gente son de otro planeta.
P: Y cuando llegó el día del examen, ¿tenía muchos nervios o lo afrontó con calma?
R: El día anterior a la hora de comer ya dejé de estudiar. La academia nos lo recomendó así. Ese día estaba tranquila y la noche también la pasé tranquila. La mañana del día del examen sí que tenía esa cosilla de nervios. Luego en el examen me puse muy nerviosa. Ese momento en el que te asignan el sitio, y estás esperando, se hace interminable. Pensaba que se me pasarían los nervios pero estuve nerviosa durante todo el examen. Volviendo al pasado hubiera intentado controlarlo algo más.
P: ¿Cómo fueron sus sensaciones al terminar el examen?
R: Salí con muy malas sensaciones. Soy la típica que sale del examen diciendo que me ha salido mal. Pero la verdad que no salí con buenas sensaciones. Había muchas preguntas que no sabía por dónde cogerlas. Dejé bastantes preguntas en blanco. No sabía cómo sacarlas. Pensaba que arriesgar era como tirarme a una piscina vacía.
P: ¿Cuáles han sido los motivos para elegir la especialidad Obstétrico-Ginecológica?
R: De primera opción tenía claro que quería matrona. Durante el último mes, antes del examen, me vine un poco abajo y pensaba que ni de broma me iba a dar la nota para llegar a coger esta especialidad. La segunda opción que tenía en mente era la de salud mental.
P: Ahora que está a las puertas de iniciar su carrera profesional en el mundo de la Enfermería, ¿qué es lo que más le gusta de esta profesión?
R: Lo que más me gusta es que al final cuando ayudas a alguien, o ves que alguien te agradece lo que has hecho por esa persona, eso es muy gratificante. Luego hay momentos y situaciones en las que llegas a pensar si merece la pena estar peleándome con la gente, pero luego compensa. Es cierto que tan sólo he trabajado un par de meses pero entiendo la visión de compañeros que llevan cuarenta años trabajando y están un poco quemados.
«En la jornada de puertas abiertas
me reafirmé en que quería ir
al Virgen del Rocío»
P: ¿Qué espera encontrar cuando comience esta nueva etapa en el Hospital Universitario Virgen del Rocío?
R: Fui a la jornada de puertas abiertas y ahí fue cuando me convencieron y me reafirmé. Hay buen ambiente en el servicio y hay muchas matronas trabajando allí. Aprendes de todo, de lo bueno y de lo malo. Es un hospital en el que se ven muchas patologías y nos dijeron que de la residencia sales sin miedo a nada y preparada para enfrentarte a cualquier cosa.
P: Finalizado su periodo universitario y, una vez que ya ha decidido su especialidad, ¿qué aspectos han sido más importantes en ese proceso de formación hasta el día de hoy?
R: La constancia por supuesto. Hay que dedicarle muchas horas y tener claro cuál es tu objetivo. De no tenerlo claro no es tan sencillo. A nadie le gusta estar doce horas metida en una biblioteca. No es fácil.
«En este punto, si tuviera que escoger de nuevo,
elegiría otra vez ser enfermera»
P: Si pudiera volver a elegir, ¿escogería ser enfermera?
R: Ahora mismo, en este punto te diría que sí. Si tuviera que escoger de nuevo, elegiría otra vez ser enfermera. A mi lo que menos me gusta de la enfermería, aunque muchos compañeros lo ven como una ventaja, es que tienes que saber un poco de todo pero tampoco sabes mucho de algo. Me gusta sentirme segura de lo que estoy haciendo en mi trabajo y dar lo mejor de mí, y sabiendo siempre lo que estoy haciendo. Compañeros con más experiencia son muy profesionales y saben muchísimo. Tú llegas nueva y te faltan esos conocimientos. Es por eso que decidí hacer el EIR, para tener parte de esa experiencia.